El intendente de Coronel Rosales, Rodrigo Aristimuño, anunció una reducción del 10% en el boleto urbano de Punta Alta. A partir de ahora, el pasaje costará 795 pesos, en lugar de los 880 anteriores. Esta medida fue tomada tras un aumento del subsidio por parte de la provincia de Buenos Aires, que representó un 1% de incremento para Rosales.

“Planteamos la semana pasada un expediente en el Concejo Deliberante para que este aumento del subsidio repercutiera en el bolsillo de la gente. Hemos coincidido con los empresarios y el concejo ha aprobado la solicitud del ejecutivo”, explicó Aristimuño.

El intendente expresó su esperanza de que esta baja incentive a más personas a utilizar el transporte público, aunque reconoció los desafíos. “La ciudad de Punta Alta no tiene la misma lógica que Bahía Blanca; las distancias son más cortas, y se nota un uso mayor de bicicletas y autos compartidos. El transporte público aquí está en terapia intensiva desde hace tiempo debido a la falta de políticas proactivas”, comentó.

Aristimuño destacó que el sistema de transporte necesita una reformulación integral. “Es necesario replantear todo el sistema, considerando recorridos, distancias y medidas para atraer a los usuarios. En Bahía Blanca, se han utilizado políticas de largo plazo que aquí no se han implementado. Nuestras unidades no son relativamente nuevas y reflejan el contexto difícil en que estamos”, añadió.

El intendente también mencionó la importancia de cooperación entre empresas, trabajadores y fuerzas políticas para mejorar el sistema. “Hay más de 50 trabajadores en el sector, y si no se adoptan medidas serias, la situación se complicará aún más. Necesitamos repensar el transporte público local para evitar consecuencias económicas negativas”, afirmó.

En cuanto a la vigencia de la baja en el boleto, Aristimuño señaló que “el decreto de promulgación ya fue firmado y se está enviando al sistema SUBE. Calculamos que en 10 días ya estará operativo”. Sobre las preocupaciones respecto al pago de salarios, comentó que “la provincia está aportando 52 millones de pesos al sistema. La capacidad de los empresarios para priorizar gastos y pagar a los trabajadores es crucial, pero esto debe resolverse entre la UTA, las empresas y, si es necesario, el Ministerio de Trabajo”.