En un alarmante incidente en la ciudad de Pringles, un adolescente de 13 años se encuentra en terapia intensiva pero estable después de intoxicarse al consumir una golosina que recogió del suelo.
El incidente ocurrió cuando el joven, en su camino a la escuela, encontró un bon o bón de chocolate aún envuelto tirado en el piso. Sin pensar en los riesgos, lo recogió, lo consumió y poco después comenzó a experimentar síntomas alarmantes, incluyendo visión nublada y mareos. Una transeúnte observó al chico y rápidamente contactó a las autoridades escolares, quienes a su vez alertaron a la familia del niño.
Al llegar al Hospital Municipal pringlense, el equipo médico actuó con rapidez, realizando un lavado de estómago y enviando muestras para análisis a Bahía Blanca, en un esfuerzo por identificar la sustancia que causó la reacción.
A pesar de la gravedad del incidente, el estado del niño se reporta como estable, y se espera con esperanza los resultados de los análisis.
Fuente: Diario El Orden