Por infracción a las leyes de policía sanitaria animal se secuestraron alrededor de 170 kilos de cortes varios bovinos, carentes de sellos, rótulos y facturas de trazabilidad sanitaria. El procedimiento se realizó en las últimas horas en un local comercial en Pedro Luro.
Ya se habían realizado procedimientos en esta carnicería por falta de higiene y fuertes olores nauseabundos aunque no se pudo establecer el origen debido a que en la inspección se prohibió el ingreso del personal policial más allá del comercio habilitado.
En esta ocasión pudieron constatar la existencia de trozos de cuero y pelo que según la investigación provenían de la carne bovina que se encontraba colgada en el salón comercial.
El allanamiento lo dispuesto el juez de Garantías Guillermo Mercuri y lo levó adelante personal del Comando de Patrulla Rural de Villarino.
En dicho comercio se llevan incautados alrededor de 400 kilos de productos cárnicos en lo que va del año”, dijeron fuentes oficiales.
