El propietario de un hotel en Carhué, Rubén Besagonill, aseguró esta mañana que por la falta de climatización en el lugar debido al cierre del predio por la pandemia, la sal de las pileta de solidificó, tal cual sucede en el Lago Epecuén.

“Pasó lo que pasa habitualmente en el Lago Epecuén, un fenómeno que había dejado de suceder cuando se inundó en el 85’ y reapareció en el 2012 y este año, ocurrió en las piletas por el hecho de estar sin climatizar. Esta sería temporada alta para nosotros y no hay nadie y está todo apagado”, sostuvo.

Indicó que desde marzo, las piletas han ido bajando de nivel “unos 40 a 50 centímetros y el salitre seco, empezaba a romper la junta del porcelanato que las reviste. Así fue que cuando la vaciamos, de la mitad para abajo tiene sal solidificada, como ocurre en el lecho del lago. Deberemos darle temperatura para que se derrita, por decirlo de alguna manera. No será fácil”.

En cuanto al coronavirus, destacó que “nunca tuvimos casos hasta ahora. Hay mucho cuidado de las autoridades, en los accesos; se cerró la hotelería antes del decreto presidencial”, dijo.

Fuente: LU24