La madre del pequeño David Kohl, que venía luchando de una cardiopatía congénita, que murió en las últimas horas, luego de una endoscopía realizada en el Hospital Italiano de San Justo. María Inés Sosa como Jairo Kohl sigue con dudas de lo que pasó ese día fatal. Creen que algo falló de parte de los médicos.
En las últimas horas, su enojo, lo hizo público en las redes sociales.
Enojo es lo que siento casi todo el dia. Porque? Por todo.
Nadie me va a convencer de que mi hijo tenia que morirse y ese era el destino por haber nacido con un defecto cardíaco. Vivimos en un país donde a chicos como David no se le da el tratamiento correcto, ya lo habíamos salvado una vez cuando había sido abandonado por los médicos, cuando ya no querían hacer mas nada. Pero esta vez fue distinto, esta vez si quisieron y lo hicieron tan bien que terminaron con su vida.
Pero que podemos esperar, si el que mete la pata sigue con su vida y su profesión como si nada hubiera pasado, la culpa era de David por ser tan complicado. Que podemos esperar, si los hospitales y los médicos se hacen la fama ellos mismos de ser pioneros, número 1, descubridores de cosas innovadores cuando al mismo tiempo abandonan chicos por complicados, por pobres o no los abandonan y los matan por una endoscopia.
Y digo ellos mismos se hacen la fama, porque cuando pedís los resultados de los tratamientos no los tienen, no les conviene tenerlos, no los brindan y los esconden.
Que podemos esperar de la obras sociales más que el deseo de que el paciente no pase el procedimiento así no seguimos metiendo plata en ese número. Y todavía tengo que aguantar la cara de culo de un pelotudo que me niega el saludo por reclamarle a OSECAC, lo que era el derecho de David o por sacar a la luz la cantidad de negativas que tuvimos durante casi sus 5 años.
Y no es suficiente con eso, sino que tengo que recibir un correo de la persona mas hipócrita diciéndome que esta al tanto de lo sucedido que cualquier cosa que necesite cuente con ella, la misma persona que en la cara me dijo que David podía hacerse ese tratamiento acá en el país sin riesgo.
Que nadie me quiera convencer que mi hijo tenía la muerte segura por su cardiopatía. A mi hijo lo mataron, lo mató un sistema de salud no apto para el, porque era considerado una cuenta de gastos y no una vida, lo mató un hospital no apto para atenderlo un equipo de médicos que no le importó nada, nada absolutamente nada.
Hace pocos días me echaron de un grupo de cardiopatía por ser desagradecida, seré desagradecida pero no miento como ellas. Sí, hoy hablo desde el odio y la bronca que siento, no quiero palabras de consuelo, siento bronca, porque David tenia que estar acá festejando Navidad y las fiestas y sin embargo no tuve el derecho ni a enterrarlo porque la justicia, el hospital que aún no entregó la Historia Clínica y todo lo que nos toca no me lo ha permitido.