Detuvieron a un hombre que es investigado por las muertes de un padre y un hijo en Pradere.
Se trata de Rubén Francisco Angelosante, vecino del campo donde aparecieron los cuerpos y con quien las víctimas tendrían una disputa desde hace mucho tiempo.
Miguel Mayer (59) falleció producto de un golpe en la cabeza y no de una descompensación cardíaca, como se había señalado en un principio, según confirmó la autopsia.
Además se confirmó que su hijo Juan Manuel recibió un impacto de bala calibre 22 en una de sus axilas.
Lo que llamó la atención de los investigadores es que, pese a los rastrillajes que se hicieron en el lugar, no fue encontrada el arma utilizada. A partir de esto se comenzó a sospechar de la participación de una tercera persona.
