Juan González y Ariel Zara son los abogados de Domingo Faustino Verna, el hombre acusado de matar a su nieto Brian Verna Batalla en el año 2022.
Verna enfrenta un juicio por jurados al ser imputado de exceso en la legítima defensa, según la calificación aplicada por Jorge Viego, fiscal del caso.
A diferencia de la acusación del Ministerio Público Fiscal, la defensa del imputado sostiene una conjetura diferente del caso.
“Nosotros llevamos una teoría del caso distinta a la del Fiscal tanto como a la del particular damnificado. Vamos a demostrar la violencia intramuros de la que fueron víctimas Domingo Verna y su esposa Marta, y de la cual se han tenido que defender durante años. En la violencia domestica, el agresor se convierte en un inquisidor, donde digita, controla y regula como tiene que vivir el resto de la familia y eso fue así durante años con ancianos de tercera edad”.
La querella sostiene, incluso desde el inicio de la investigación, que se trató de un crimen premeditado. “El abuelo lo estaba esperando. Mi hijo llegó, él abrió el portón, lo provocó y cuando Brian reaccionó, cerró el portón y ya tenía el arma preparada“, resaltó Mariel, madre de Brian.
Sin embargo, los defensores de Verna refutaron estos dichos. “Con respecto al arma, no importa cómo o donde la tenía, sino cuándo la usó: la usó como ultimo recurso. Él todo el tiempo buscó protegerse en su propiedad y que el nieto no rompa la puerta a patadas. Cuando Brian lo hizo, Domingo quedó a merced de su atacante y ahí utilizó el arma como última opción. El arma estaba cargada como el resto de armas que estaban cargadas en la casa por una cuestión de seguridad. Nadie tendría en la vivienda un arma que no esté cargada ¿de que sirve?“, destacaron.
Ante la duda sobre si se hubiera podido evitar el fatídico desenlace, uno de los letrados manifestó “Esto se pudo haber evitado si quienes estaban al cuidado de Brian, su madre y su novia, no hubieran permitido que saliera al ataque de los abuelos”.
Por otro lado, una de las principales preguntas que surgió a lo largo de la investigación tiene que ver con que los abuelos no llamaron a la policía para pedir ayuda ante los ataques de su nieto. “Quien estaba en condiciones de llamar al 911 no era justamente el abuelo tras recibir 13 golpes en zonas vitales. El abuelo estaba obnubilado y en shock como para llamar. Quienes estaban en mejores condiciones de hacerlo eran la madre o la novia de Brian”, objetaron.
El particular daminificado asegura que fueron muchos los disparos que dio el abuelo contra su nieto y que estaba decidido a terminar con su vida. Ante esta hipótesis, Zara y Gonzalez contestaron: “Hay que ponerse a pensar en los segundos en que tardaron en darse los disparos, todo fue en 3 segundos. Entonces ¿como detener una pulsion defensista en 3 segundos?”
“Hay que ubicarnos en el lugar de un abuelo de 77 años que estaba dentro de su propiedad y que había sido golpeado”, concluyeron.
Esta entrada ha sido publicada el 22 de octubre, 2024 12:00
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