Un incendio destruyó totalmente un puesto de venta de frutas y verduras.
Las llamas arrasaron con la mercadería y el mobiliario que estaba ubicado en Zelarrayán y Fortineros.

En el lugar debió trabajar una dotación del Cuartel del Bomberos Central, la Guardia de Defensa Civil y el personal policial.
El fuego habría comenzado de manera intencional.