La justicia federal procesó, con prisión preventiva, a los dos detenidos en el marco de una causa donde se investiga a una banda narco que operaba en nuestra ciudad.
La jueza Gabriela Marrón dispuso que Antonella Pinilla y Maximiliano Cornago continúen detenidos. A ambos se los acusa de tráfico de estupefacientes en la modalidad de tenencia con fines de comercialización. Además a Cornago le imputan el delito de lavado de activos de origen delictivo.
En la investigación ya habían sido detenidos Fabián Enrique Accarino, Alejandro Alberto Crescitelli y Alejandro Miguel Darío Bustamante. Durante los allanamientos de febrero los efectivos de Prefectura lograron secuestrar 160.000 dólares y más de 2 millones de pesos. Además se encontraron casi 15 kilos de cocaína. A esto hay que sumarle otros 6 kilos de la misma droga secuestrados el 3 de marzo. Cada ladrillo de esa droga está valuado en unos 10 mil dólares.
Antonella Pinilla es la pareja de Fabián Enrique Accarino. Los investigadores llegaron a ella luego de las analizar los teléfonos celulares secuestrados durante los allanamientos realizados a principios de febrero. Las comunicaciones evidencian que la mujer tenía participación directa en la venta de drogas: se encargaba del fraccionamiento de la cocaína, por ejemplo.
En tanto, Maximiliano Cornago sería el encargado de diseñar las maniobras de lavado del dinero. Tomaba el efectivo obtenido por la venta de drogas y lo introducía en el circuito legal. Se recuerda que a Cornago ya se le había imputado, además de la tenencia de droga y comercialización, dos maniobras de lavado de dinero relacionadas con un inmueble y un vehículo que estaban a nombre de un testaferro.
En la casa de Cornago, la justicia encontró un trozo compacto de cocaína y varias pertenencias de Accarino. También fueron hallados envoltorios idénticos a los que contenían la droga secuestrada en febrero. La cocaína encontrada estaba separada en dos tipos de paquetes distintos. Uno con la figura de Papá Pitufo, que contenía la droga de color celeste. Y el otro con la imágenes de la Pantera Rosa, con la cocaína de color rosado.
Pero eso no es todo. Durante los procedimientos se descubrió que Cornago le estaba guardando dos autos a Accarino: uno de ellos era buscado desde los primeros allanamientos. Para evitar que sea reconocido, los acusados lo habían “tuneado” y le habían cambiado la patente. El otro vehículo era una camioneta Honda que en su interior tenía 6 kilos de cocaína compacta y una prensa. El vehículo estaba acondicionado para esconder droga.
Otro dato que llamó la atención a los investigadores es que los paquetes de droga secuestrados estaban identificados con lo que se presume sería un número de lote.
La cantidad de droga secuestrada, la metodología de traslado y comercialización y los movimientos para el lavado de dinero hace sospechar a los investigadores de que la banda no sólo vendía drogas en nuestra ciudad, sino que tenía un radio de acción mucho más amplio.