César Esteban Lagos fue condenado a 33 años de cárcel, más una condena en suspenso de 12 años, dando un total unificado de 45 años de prisión.
Lagos estaba acusado de abuso sexual ultrajante con acceso carnal y robo contra una joven que esperaba el colectivo. La redujo, la arrastró hasta un descampado y allí abusó de ella dos veces, además de robarle sus pertenencias.
Los abusos, ocurridos en el año 2017, le ocasionaron un daño muy grave en la salud mental a la víctima, el cual quedó probado en el juicio.
Lagos ya tenia otra condena de 13 años por dos hechos de características idénticas en el 2009, y con salidas transitorias volvió a abusar. Por este motivo, la fiscal Marina Lara pidió unificación de penas (habia solicitado 48 durante alegatos).