El método era siempre el mismo y lo tenía planificado al detalle pero uno de sus últimos golpes, en abril, marcó el principio de su caída. El hombre que fue detenido ayer en el barrio porteño de La Boca está acusado de seducir mujeres en un boliche de la zona oste del conurbano, sacarles las llaves de su casa para hacerles una copia y después ir a robarles con el resto de la banda.
La investigación empezó hace poco más de cuatro meses cuando tres ladrones armados asaltaron y amenazaron con violar a tres mujeres, una madre y sus dos hijas, en una casa de Nueva Pompeya. Escaparon con dinero, joyas, relojes, electrodomésticos y vehículos, pero quedaron marcados y la policía les pisaba los talones.
Así fue como descubrieron que el ataque a las tres mujeres no había sido un hecho aislado y que en todos los casos los delincuentes entraban a las casas sin forzar la cerradura porque tenían una copia de la llave.
Al joven detenido este lunes lo apodaban el “seductor” porque su rol era el de atraer a las víctimas en el boliche. Después, les sacaba las llaves para que sus cómplices pudieran hacer un duplicado sin ser advertidos y las devolvía. Lo atraparon efectivos de la División Sumarios y Brigadas de la Comuna 1 de la Policía de la Ciudad cuando caminaba por la calle Suárez al 1100.
Además de los ataques a mujeres por los cuales era buscado, el detenido tenía antecedentes también por cometer robos bajo la modalidad “motochorros”, robos de vehículos a mano armada y con la utilización de un dispositivo inhibidor, y entraderas en domicilios.
Fuente: tn.com.ar
