Una banda integrada por dos hermanas, que se hicieron pasar por promotoras para seducir a dos hombres y entregarlos para que fuesen secuestrados, fue desarticulada luego de diez allanamientos en distintos puntos del conurbano.

Los operativos fueron efectuados en Paso del Rey, Merlo, Isidro Casanova, Longchamps y Villa Albertina. Hubo nueve detenidos, entre ellos las dos mujeres que captaban a las posibles víctimas, y siete hombres.

A raíz de la denuncia de una de las víctimas, los detectives del Departamento Antisecuestros y de Investigación del Secuestro Extorsivo de la Policía Federal iniciaron una investigación y descifraron el modus operandi de la organización.

Todo comenzó en noviembre del año pasado, cuando una de las mujeres -haciéndose pasar por promotora- llamó la atención de un hombre en Pinamar y empezaron a mantener una relación.

Luego de varios meses, el 9 de marzo acordaron verse nuevamente y programaron una salida en la que este hombre fue con un amigo empresario, y la joven llevó a su hermana.

Los cuatro fueron a un bar en Ituzaingó en una camioneta Amarok de uno de ellos, y al cabo de dos horas una de las chicas dijo que quería regresar y las llevaron hasta cerca de su casa, en Paso del Rey.

Una de las mujeres hizo bajar del vehículo a uno de los hombres para besarlo, momento en el que aparecieron varios delincuentes armados y lo encerraron en el baúl de una Suran y lo llevaron hasta un terreno en Merlo, donde lo mantuvieron cautivo con precintos.

Mientras tanto, a su amigo lo dejaron de la Amarok y le taparon la cabeza con una bolsa. Luego le exigieron dos millones de pesos para liberar a la otra víctima, y tras varios llamados logró obtener 60.000 dólares que fue a buscar a un departamento en Puerto Madero con los delincuentes.

Tras entregar el dinero, los secuestradores liberaron a ambos en Merlo aunque también robaron la camioneta Amarok, 40.000 pesos y teléfonos celulares.

Luego de la denuncia de los amigos, la Policía rastreó la camioneta y la localizó en Lanús, donde los efectivos la interceptaron y detuvieron al conductor, quien tenía en su poder los celulares de las víctimas.

Del análisis del teléfono de este detenido y de las tareas de inteligencia, los uniformados encontraron vínculos entre las hermanas y el resto de la banda.

Toda esta información le fue entregada al fiscal 1 de Moreno-General Rodríguez, Leandro Ventricelli, quien ordenó el allanamiento de diez viviendas vinculadas con la organización, con la colaboración del titular de la Unidad Fiscal especializada en Secuestros Extorsivos, Santiago Marquevich.

Fuente: tn.com.ar