El último lunes una joven de 16 años fue sorprendida por un hombre mayor en la cuadra de Zelarrayán al 3300. La chica le preguntó por qué la venía siguiendo y el hombre sin mediar palabra la tomó del pelo y la arrastró por el suelo hacía un descampado.
En una señal evidente de abuso, la menor comenzó a gritar desesperadamente mientras el hombre con los pantalones bajo intentaba llegar hasta un lugar oscuro sin que nadie los viera.
Por fortuna, una vecina que escuchó los gritos salió a ayudar a la pequeña que seguía gritando en el suelo. Esta mujer liberó a la chica y golpeó al abusador quien escapó rápidamente del lugar.
Fernanda, la mamá de la chica, explicó que hizo la denuncia y que en la comisaría le dijeron que ya se habían registrado tres hechos similares en ese lugar.