Cuatro delincuentes armados asaltaron violentamente a una familia en Tucumán al 1700.
Los ladrones obligaron a entrar a la casa la propietaria del lugar. Una vez en el interior, de la vivienda amenazaron a todos los integrantes de la familia, los ataron y los encerraron.
La banda tenía un handy con el cual monitoreaba la frecuencia policial.
Del lugar escaparon con dinero en efectivo, elementos de electrónica y el vehículo de las víctimas, que luego fue abandonado.