Revelan que un alimento denostado por años sería el secreto de la longevidad

Existen alimentos que tienen muchas propiedades que ayudan al organismo y que son primordiales a la hora de mantener una alimentación sana que mejore nuestra calidad de vida. Sin embargo, las harinas y el pan en especial, han sido demonizados por años, pero ahora un descubrimiento lo convierte en esencial para la longevidad del ser humano.

Según el reconocido periodista y experto en longevidad Dan Buettner, el consumo de ciertos tipos de pan podría ser uno de los factores que contribuyen a la mayor esperanza de vida en las zonas conocidas como “zonas azules”, regiones del mundo donde se encuentran las personas más longevas.

Buettner, famoso por su trabajo con National Geographic y su investigación sobre las “zonas azules”, dedicó años a analizar los hábitos de vida y alimentación de lugares como Okinawa (Japón), Ikaria (Grecia), Loma Linda (EEUU), la península de Nicoya (Costa Rica) y Cerdeña (Italia). En estas regiones, no solo se vive más, sino que la calidad de vida en la vejez es excepcional. Y hay un elemento común en la dieta de muchas de estas zonas: el pan.

¿Qué hace que el pan sea un alimento para la longevidad?

Contrario a la creencia popular de que el pan debe evitarse por su contenido en carbohidratos, Buettner explica que, en estas regiones, el pan es una fuente importante de nutrientes. En Cerdeña, una de las zonas más estudiadas, los hombres que han vivido más de 100 años han consumido hasta un 60% de sus calorías diarias de pan y pasta, según investigaciones demográficas.

No todo el pan es igual y es en este punto en donde está el secreto de la longevidad. El pan que se consume en Cerdeña, y que Buettner denomina como el “pan de la longevidad”, está hecho de masa madre fermentada con lactobacillus, un tipo de bacteria que transforma el proceso de fermentación.

A diferencia de los panes hechos con levadura comercial, este pan tiene un contenido mucho más bajo de gluten y se metaboliza más lentamente, lo que ayuda a reducir la carga glucémica en un 25%. “La clave está en cómo se produce y qué ingredientes se utilizan. No todos los carbohidratos son malos”, asegura el investigador, ya que el pan artesanal hecho con masa madre y harina integral es muy diferente al pan industrial con harinas refinadas y aditivos.

En las zonas azules, el pan es visto como un alimento nutritivo, parte de una dieta basada en ingredientes simples y naturales. Además, es un acompañamiento frecuente en comidas llenas de vegetales, legumbres y proteínas magras, lo que ayuda a mantener un equilibrio saludable en la dieta.

Fuente: Eltrece