Con apoyo de gran parte del arco político, la Cámara de Diputados debatirá un proyecto de ley del PRO para regular las huelgas docentes y obligar a las escuelas a abrir los días de paro. Mientras la UCR, la Coalición Cívica, La Libertad Avanza, Hacemos Coalición Federal e Innovación Federal en principio dan su apoyo, desde Unión por la Patria y la izquierda se oponen, en sintonía con los gremios del sector.
La propuesta, impulsada por Alejandro Finocchiaro, quien fue ministro de Educación con María Eugenia Vidal y Mauricio Macri, busca declarar a la educación como un “servicio estratégico esencial”. En ese sentido, el legislador planteó que el objetivo es limitar lo que describe como “paros políticos”, en referencia a las huelgas convocadas por Ctera, a las que considera más como acciones políticas que sindicales.
Entre otros puntos, la iniciativa propone que, en caso de paro, el 30% del personal de la escuela deberá permanecer en sus puestos durante los dos primeros días de huelga, para garantizar la continuidad de las clases. Si la medida de fuerza se prolonga por más de dos días, este porcentaje se incrementaría al 50%. De esta manera, aunque se permitiría la realización de las protestas, estas deberían llevarse a cabo bajo las condiciones estipuladas por la nueva normativa.
Para asegurar el cumplimiento de la ley, uno de los artículos del proyecto especifica que, a principios de cada año, los equipos de conducción de las escuelas deberán informar a las autoridades sobre la “nómina anual del personal docente y no docente que estará afectado al cumplimiento” de esta medida. Esto permitiría una planificación anticipada y evitaría la interrupción total del servicio educativo durante las huelgas.
La propuesta genera un rechazo significativo entre los gremios docentes y por fuerzas como Unión por la Patria y la izquierda, ya que consideran que busca restringir el derecho a huelga..