La mujer cumplía prisión domiciliaria en una causa por usurpaciones vinculadas a una banda narco.
La mujer que estafó en 4,5 millones de pesos a un joven boliviano radicado en Puerto Madryn a través de la aplicación Tinder fue detenida en las últimas horas: Además de ser expolicía purgaba una condena de 4 años bajo el beneficio de prisión domiciliaria, en una causa por usurpación de viviendas vinculada a una causa de narcotráfico.
La mujer fue identificada como Leila Micaela Ríos, de 27 años y domiciliada en la ciudad de Santa Fe, informó el diario El Litoral de Corrientes.
Ríos conoció en 2019 a su víctima, un joven boliviano de 24 años que vive en Puerto Madryn, en la provincia de Chubut, a través de la aplicación de citas Tinder.
Tras entablar una relación sentimental, la expolicía utilizó distintos engaños para sustraerle dinero al joven. Según el periódico, la víctima comenzó pagándole el alquiler y luego le siguió enviando dinero para saldar supuestas deudas.
Finalmente, le mintió diciéndole que debía dinero a prestamistas que le harían daño si no pagaba una importante suma. Incluso, los supuestos usureros se comunicaron con el joven para amenazarlo.
El muchacho siguió enviando dinero, pero al mismo tiempo decidió hacer la denuncia ante la policía. En ese entonces ya había enviado 4,5 millones de pesos.
“Ella me comentó cosas de su vida. Me dijo que había sido abandonada por dos maridos y que tenía tres hijos que mantener”, relató la víctima en su denuncia. Además, contó: “Yo en principio accedí a ayudarla y mandé distintos montos. Con el tiempo esto era más frecuente porque sentía que el vínculo era más cercano, más allá de ser virtual”.
Los investigadores siguieron el hilo de los mensajes y llegaron hasta la casa de Ríos en la ciudad de Santa Fe.
Laila Ríos vive en el barrio Sargento Cabral de la ciudad de Santa Fe y era policía hasta el año pasado. Fue detenida y condenada en una causa que involucra a una banda narco de la capital provincial, liderada por Juan Pedro “Pato” Calderón, escribió El Litoral.
Según el periódico, esta organización delictiva era investigada por la justicia local a raíz una serie de violentas usurpaciones. La causa derivó en el secuestro de 200 kilos de marihuana.
La justicia no pudo vincular a Ríos con los estupefacientes, pero la acusó por apropiaciones ilegales de inmuebles. Entonces fue condenada a 4 años de prisión, pero le permitieron cumplir la sentencia en su domicilio porque es madre de tres nenes. Desde su vivienda estafó al joven boliviano radicado en Chubut.
La fiscal María Laura Urquiza inició los trámites para solicitar que se le revoque la prisión domiciliaria.
Fuente: TN
Esta entrada ha sido publicada el 28 de marzo, 2022 11:06
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