El hombre trabajaba en el área de sistemas de la firma estafada. Junto con su cómplice, que también fue arrestado en San Fernando, contaron con la ayuda de al menos otras dos trabajadoras para desviar el dinero sustraído.
Dos hombres fueron detenidos este jueves en el partido de San Fernando, acusados de haber estafado a una empresa de venta electrónica de ropa deportiva a la cual le robaron unos 12 millones de pesos de sus “billeteras electrónicas” para luego comprar equipos informáticos e invertir en criptomonedas.
Según los investigadores, uno de los apresados era empleado del área de sistemas de la firma estafada y, junto con su cómplice, contaron con la colaboración de al menos otras dos trabajadoras que aportaban sus cuentas bancarias para desviar el dinero proveniente de las estafas.
Los arrestos se concretaron hoy tras seis allanamientos realizados por agentes de la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) de San Isidro en casas del partido de San Fernando. Los imputados fueron identificados como Franco Augusto Findling y Ramiro Leandro Ramírez, que el viernes serán indagados por la fiscal María Virginia Toso, titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) de Don Torcuato.
Las fuentes consultadas aseguraron que todo comenzó el 20 de marzo pasado cuando el personal de finanzas de la empresa, que se dedica a la venta electrónica de ropa deportiva, detectó un faltante de dinero de una de sus cuentas de Mercado Pago.
Según los investigadores, las maniobras de estafas se mantuvieron hasta abril pasado. En este lapso quedaron registradas unas 45 transferencias desde dos “billeteras electrónicas” que posee la empresa hacia cuentas bancarias, por un monto superior a los 12 millones de pesos.
Para la Policía, los detenidos utilizaron “técnicas de manipulación informática que alteraron el normal funcionamiento del sistema informático, conocido como ‘cracking’, y obtuvieron un ilegítimo beneficio económico para vulnerar las cuentas que la empresa posee registradas en la plataforma Mercado Libre”.
Los sospechosos realizaron como “prueba” una primera transacción de 204 mil pesos a una cuenta a nombre de una tercera persona, la cual tuvo un resultado exitoso. Luego, crearon un perfil falso de Mercado Libre (denominado en la jerga policial como “cuenta mula”), al cual se le realizaban depósitos constantes de altas sumas de dinero.
Un investigador relató que se cree que entre el 21 de marzo y el 18 de abril se realizaron “al menos 43 transacciones bancarias de aproximadamente 250 mil pesos cada una”. Además se sospecha que más de dos millones y medio de pesos fueron utilizados por los detenidos para la compra de objetos de informática y el resto fue transferido a cuentas propias o de otras tres personas, dos de ellas también empleadas de la empresa.
Una fuente de la pesquisa aseguró que con el dinero proveniente de la defraudación, los detenidos “adquirieron principalmente equipos informáticos en tiendas de computación como OneClick o HiperGaming” y que, mediante escuchas telefónicas se logró establecer que “ambos poseen negocios en común vinculados a la compra de criptomonedas”.
Fuente: TN