En una nueva embestida del Gobierno contra la ciudad de Buenos Aires, el presidente Alberto Fernández consideró que “los distritos con clases presenciales” en pandemia “están jugando con fuego y el fuego va a quemar a la gente”. Le hizo duros cuestionamientos al jefe de gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta, en la vuelta de la actividad en los colegios durante la segunda ola de contagios de coronavirus.
Mencionó el caso de Alemania y dijo que en el país europeo “hay una estimación que se hace para medir el riesgo de la pandemia”. Sostuvo: “En Alemania con una tasa de incidencia de 320 contagios cada 100.000 habitantes -en dos semanas- se cierran las escuelas. En Estados Unidos es de 100. La Ciudad está con una incidencia de 1050 y Córdoba 1099, es decir que se triplica el indicador de Alemania y el conurbano bonaerense lo duplica con 750”.
En cuanto al impacto del último confinamiento sostuvo que los efectos de estas medidas se van a ver recién en 15 días. Dijo que entiende que “poco a poco deberían bajar los casos”. Consideró que “no es una situación simple y con esto solo no se arregla” y manifestó que “es necesario seguir sosteniendo al máximo la menor circulación posible”.
Expresó que mencionó estos datos “para que la gente entienda que no es un capricho, no es que se nos ocurrió arruinarles la vida a los porteños, cordobeses”. Dijo que con las limitaciones “la idea es cuidar a la gente, y está visto que la educación moviliza al 25% de lo que circula diariamente en Buenos Aires”.
Sostuvo que esta semana se pasó a “a una etapa más accesible”, después de las limitaciones duras. Aclaró que esto “no quiere decir que las cosas estén bien sino que hay que seguir cuidándose, evitar la circulación y evitar el contacto o la cercanía entre la gente porque vemos que es un virus que mutó su cepa y que ataca gente entre 40 y 70 años”.