La Maratón Nacional de Lectura, que organiza Fundación Leer para fomentar el hábito lector en las infancias, celebra mañana su 18° edición con la participación de autores como Isol, Chanti, Silvia Schujer y Fernando de Vedia, en lo que será una jornada inédita porque a pesar de las limitaciones que supone su adaptación a lo virtual posibilitará una experiencia de mayor alcance, que ya cuenta con diez mil instituciones y tres millones de personas inscriptas.
“Lanzamos la campaña en febrero cuando no había pandemia. Las escuelas ya habían comenzado a inscribirse y nos preguntamos muchas veces qué hacer. La maratón quiere que todos nos abracemos alrededor de la lectura y nada más inapropiado en este momento pero tomamos la decisión de hacer una campaña distinta, haciéndonos cargo de la organización y que a su vez pudiera darle una mano a los docentes que están abarrotados de cosas”, cuenta Patricia Mejalelaty, titular de la Fundación Leer.
Aunque la pandemia impide los abrazos y obliga a la aceleración de redes virtuales, también ofrece alternativas masificadoras: “Hoy la tecnología nos está ayudando a responder a las escuelas, a pedidos de autores e ilustradores que nos han hecho durante 18 años y ahora los tenemos a todos en una plataforma. Hay una nueva modalidad que es un salto cualitativo y cuantitativo. La hicimos este año tratando de experimentar una forma pero la potencia de lo que va a suceder abre la agenda de un camino“.
Lo del viernes será una jornada para celebrar, promover y fomentar la lectura. Y para ello estarán los autores e ilustradores acompañando el encuentro con los libros y la literatura, como Isol, Alejandro O’Kif, Alexiev Gandman, Brocha, Canela, Cecilia Pisos, Chanti, Cucho Cuño, Fernando de Vedia, Istvansch, Liliana Cinetto, Luciano Saracino, María Inés Falconi, María Laura Dedé, Pablo Bernasconi, Pablo Pino, Romina Carnevale, Paola Vetere, Shumi Gauto, Silvia Schujer, Victoria Bayona y Walter Poser.
Se esperan talleres, lecturas y diálogos con autores: Saracino, por ejemplo, invitará a crear un superhéroe, Canela compartirá en vivo un cuento, Chanti enseñará a contar historietas, Isol compartirá un momento de creación, Cinetto responderá preguntas, Shumi Gauto leerá en voz alta un cuento feroz, Bernasconi responderá preguntas viajeras, Pisos convocará a crear coplas y Fernando de Vedia sumará lecturas y sorpresas.
Toda la jornada tendrá como escenario una plataforma especialmente diseñada para la maratón (conectadosporlalectura.leer.org.ar) de acceso gratuito y además están preparando material para enviar por medio de WhatsApp “para aquellos chicos que no tienen estos recursos puedan ser parte de la maratón porque no se consumen datos. Hay chicos que están todo el día en clases de Zoom, mientras que otros comparten un celular con toda la familia”, ejemplifica Mejalelaty.
“La Argentina es un país complejo y en este momento tenemos tantas realidades como casas y escuelas. La situación es bastante disímil” y en este contexto de emergencia sanitaria “obviamente los maestros están haciendo lo imposible de crear en la lectura un espacio para chicos”, sostiene.
Además de las actividades con escritores e ilustradores se podrá acceder a una biblioteca digital con más de un centenar de libros y audiolibros. Si bien la biblioteca no es algo exclusivo de la jornada porque es un espacio que ya existía y en el que cada quince días se renuevan los contenidos gracias a los derechos que ceden autores y editores, en esta oportunidad estará disponible todo el catálogo de acuerdo a distintas edades.
Autores, chicas, chicos, padres y educadores se darán cita en la maratón.
“Empezamos la cuarentena con seis millones de libros leídos y hoy, cinco meses después, hay más de 12 millones leídos. Tenemos la marca porque los chicos después de leer el libro responden una trivia. El objetivo es que lean más de 20 libros al año”, dice Mejalelaty y agrega un dato: “En 22 años hemos distribuido 2 millones de ejemplares en papel, en 3 años hemos distribuido 12 millones de libros digitales, nuestra misión se ve acelerada de una manera enorme”.
Fuente: Telam