Cuando el disparo impactó en su pecho, Lorena Saucedo estaba en la vereda de su casa, en Chaco, junto a su hermana y su sobrino. El hombre que la atacó era su vecino, quien había cumplido condena hasta hace dos semanas por otro homicidio y tenía además restricción de acercamiento por violencia de género. Se escapó en una moto pero lo detuvieron unas horas después.
La madre de la víctima contó que, en la huída, Fernando Aguirre, de 21 años, también disparó contra su otra hija y el nene de ella, pero que ambos resultaron ilesos. La suerte de Lorena fue distinta. La operaron de urgencia en el Hospital Julio C. Perrando pero no pudieron salvarla y murió esa misma noche.
Según el relato de la mujer, Aguirre no había tenido nunca una relación con su hija pero aún así la hostigaba y la amenazaba con armas. Además, la hermana de la víctima también lo había denunciado por violencia de género y tenía una perimetral. Nada pudo evitar el trágico desenlace.
El agresor tenía todavía en su poder un revólver cuando lo detuvieron que, se presume, fue el que usó para asesinar a su vecina. El fiscal penal en turno de Resistencia, Jorge Cáceres Olivera, lo acusó por el delito de "homicidio" pero la imputación podría agravarse si se demuestra que el crimen se cometió en un contexto de violencia de género.
“Estamos destruidos por lo que pasó. Jamás pensamos que alguien lastimaría a una chica así, que trabajaba y estudiaba. Justo ahora se había recibido. Y tenía que ingresar a trabajar la semana que viene. Y pasó esto”, dijo al sitio Chaco por Día Ramón Sánchez, tío de la joven.
La muerte de Lorena conmocionó al barrio. Los vecinos intentaron incendiar la casa del presunto autor del crimen y se enfrentaron a la policía cuando las fuerzas de seguridad custodiaban la vivienda y Aguirre todavía se encontraba prófugo.
Fuente: tn.com.ar
