Las cinco personas que estuvieron con Natacha Jaitt en Benavídez las horas previas a que la encontraran muerta ya declararon ante la Justicia, se hicieron allanamientos pero todavía la investigación no tiene ningún imputado. Pocas horas después de despedir sus restos en el Cementerio Israelita de La Tablada, el hermano de la modelo y conductora anticipó que se presentará como querellante y afirmó: “Mi hermana no atentó contra su vida”.
Si bien las primeras pericias determinaron que la mediática murió a causa de una falla multiorgánica y que su cuerpo no presentaba signos de violencia, Ulises Jaitt mantiene su sospecha sobre un posible asesinato. “Nada de lo que pasó es normal”, remarcó en TN, en referencia a las supuestas contradicciones de los testigos y el tiempo que tardaron en llamar a una ambulancia. “Todo me lleva a un homicidio pero no tengo pruebas”, agregó.
Fuente: tn.com.ar