César Comezaña, es médico cardiólogo y fue director del Hospital Penna hasta 2015. Nació en San Antonio Oeste, y a los 18 años se fue a estudiar a La Plata. “Mis padres hicieron un gran esfuerzo para que fuera a La Plata y es por eso que me recibí en 6 años”, dijo.
Tenía familiares en Bahía Blanca, y sabiendo que la cardiología, era un área que no tenía grandes soluciones en la ciudad en aquel entonces, planteó una idea para llevar a cabo, y a través de una beca de FEMEBA (Federación Médica de la Provincia de Buenos Aires) llegó a la ciudad para instalarse y trabajar aquí.
“La medicina se aprende en los hospitales públicos, más que en la facultad. En la facultad hay mucho de teórico, pero en el hospital uno tiene ambas cosas, y mucho de práctica y el desarrollo profesional, se da ahí“, dijo Comezaña, que además sostuvo que cambió mucho la vida y pensamiento de los médicos. “Yo llegué a trabajar un año gratis, eso ahora es imposible de pensar“, agregó.
Fue director asociado y luego director ejecutivo del Hospital Penna, un cargo que jamás pensó que iba a ocupar. “Yo pensaba en volver a mi pueblo para ejercer allá y Bahía sería un paso intermedio, pero bueno se dio de otra manera y traté de dar lo mejor posible”, sostuvo.
Entre los aspectos positivos que recuerda de su paso como director del Hospital Penna, está la creación de la Sala de Neonatología, se compraron cámaras para farmacias y laboratorio, se instaló un resonador que era el primero para un hospital público en la región. Y entre lo negativo, enfrentamientos, entre otras cosas. “Los cargos ejecutivos no están para que todos te aplaudan, sino tenes que entender a los que no te aplauden también”, añadió Comezaña.
Por último el facultativo dijo “Yo me siento que estoy cumpliendo con todo un ciclo de formación y satisfacción por lo que he hecho a lo largo de la vida”.