Gabriela Biondo, a los 18 años, se decidió por irse a Buenos Aires. Se recibió de Licenciada en Comunicación. “Quería cantar tango, y Buenos Aires, era el lugar para desempeñarme mejor en el género, pero a su vez tenía que estudiar una carrera y traerle el diploma a mi padre, porque sino se pudría todo”, dijo Gaby, que heredó la pasión de sus abuelos.
Cuando terminó la carrera, se volvió a Bahía, con José Valle, y un hijo, Galo. Uno podría creer que se trataba de un retroceso en su carrera artística, pero se dio todo lo contrario. Según contó, hacía falta explorar lugares y darle otra impronta a una ciudad que tenía capital humano, pero aún sin difusión. Y con su pareja, fueron de a poco logrando lo que se propusieron.
Gaby da clases durante la semana y con respecto a sus ensayos, dice que todo el tiempo está en ejercicio de educación vocal. Y en cuanto al repertorio, siempre se intensifica, unos meses previos a la presentación de un espectáculo.
Alguna vez le propusieron hacer un tango electrónico, y dice que no descarta sumarse a alguna idea artística más allá del género que a ella le apasiona.
Actualmente tiene 4 programas radiales, y 3 son netamente tangueros, en distintas emisoras. Por otra parte contó que había empezado a estudiar en pandemia, Ciencias políticas, hizo una diplomatura en tango, y también finalizó el curso de locución. Otras de sus pasiones es cocinar.
Gabriela dice que si no hubiera sido cantante de tango, seguramente su camino la hubiera llevado para el lado del folklore, porque su hermana bailó desde muy chica. Y saliendo del rumbo artístico, le hubiera gustado estudiar abogacía, pero hubo cosas que no la convencieron y se volcó por otra actividad.
Con más de 25 años de carrera, hoy es una reconocida artista nacional, que salió de Bahía Blanca, que tiene muy arraigada sus raíces y que intenta aportar su granito para que el tango siga vigente con el paso de los años.
Esta entrada ha sido publicada el 28 de diciembre, 2022 11:29
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