El amor es un sentimiento muy fuerte y poderoso y, cuando estamos enamorados, nuestra perspectiva del mundo cambia, nos sentimos dichosos. Para celebrar el amor, tenemos el Día de San Valentín, también conocido como Día de los Enamorados y, al igual que ocurre con todas la emociones, el amor también se localiza en el cuerpo y no sólo en el corazón como se suele imaginar.
Al estar enamorados, el cuerpo se convierte en una vidriera en la que se muestran los cambios químicos que se producen a nivel interno. Algunos de estos cambios son:
- mayor liberación de endorfinas
- reducción en los niveles de cortisol
- incremento en la producción de dopamina, oxitocina y norepirefrina
- aumento en los niveles de estrógenos
- liberación de melatonina.
Estar enamorado podría reducir el estrés, ya que, según una revisión publicada en 2005 por la revista Neuroendocrinology Letters, el amor activa áreas del cerebro responsables de la atención, la emoción, la memoria y la motivación y podría tener un papel en el control del sistema nervioso autónomo, es decir, en el control del estrés.
Los nueve beneficios del amor para la salud
Los cambios que produce el amor y benefician a nuestra salud son varios y Nuria Javaloyes, psicóloga y psicooncóloga en Hospital Quirónsalud Torrevieja nos habla de los siguientes:
- Mejora las defensas. Al producirse mayor liberación de endorfinas, la sensación de felicidad aumenta, ya que son las sustancias conocidas como mejores antidepresivos naturales, permitiéndonos disfrutar más de la vida. Además, las endorfinas mejoran el funcionamiento del sistema inmunológico, por lo que el amor mejora también nuestras defensas ante enfermedades.
- Baja los niveles de estrés. El cortisol es la hormona que se libera como respuesta al estrés y origina un aumento de la tensión arterial. El enamoramiento reduce esta hormona por lo que se reducen los efectos negativos del estrés crónico en nuestro organismo, de una forma natural y placentera.
- Aumenta nuestra felicidad. La liberación de dopamina puede hacernos sentir más felices. Como consecuencia, podemos ser capaces de ver oportunidades en las dificultades y en nuestra mente pueden abundar más los pensamientos positivos. En concreto, lo que ocurre es que las vías de dopamina en el cerebro juegan un papel en los sentimientos placenteros, la atención enfocada, la motivación y los comportamientos orientados a objetivos asociados con el amor romántico. Así lo asegura el estudio publicado en 2006 llevado a cabo por investigadores estadounidenses.
- Disminuye el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Gracias al amor se incrementa también la producción de dopamina, oxitocina y norepirefrina lo cual ayuda a reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
- Rejuvenece nuestra piel. Al aumentar los niveles de estrógenos, nuestra piel mejora y esto hace que nos vean y que nos veamos más jóvenes.
- Nos da vitalidad. Además, la liberación de melatonina producida al sentir amor, mejora la autoestima y nos aporta una sensación de vitalidad difícil de sentir si no hay amor en nuestra vida.
- Nos hace estar más bellos. Gracias al aumento de estrógenos durante la etapa del enamoramiento experimentamos notorios cambios físicos como el embellecimiento de la piel, el cabello y las uñas.
- Aumenta nuestra autoestima. Amar y ser amado nos ayuda a encontrarle un sentido a nuestra vida, y a sentirnos importantes, seguros y con una sensación de valía personal y autoestima básicas para la salud psicológica e integral.
- Nos da más salud. Desde una base científica, el amor beneficia a la salud no sólo en los primeros momentos del enamoramiento sino también cuando ya sentimos más estabilidad y más calma con nuestra pareja de muchos años de duración.
Fuente: TN