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Julio Bocca cumple 56 años: así fue el concurso que lo catapultó a la fama mundial

En 1985, ganó un certamen en el escenario del célebre teatro Bolshói de Moscú. Su pareja de baile fue Raquel Rossetti, quien lo conocía desde que era un nene.

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Como para la mayoría de los bailarines clásicos, el sueño adolescente de Julio Bocca -que cumple 56 años- era bailar en el Bolshói, el legendario teatro de Moscú. Y con el paso del tiempo, aquel chico nacido en la localidad bonaerense de Munro, niño prodigio de la danza, que comenzó a practicar formalmente a los 6 años con su madre, Nancy, como profesora, cumpliría ese sueño.

Sin embargo, la primera vez fue tan exitosa como compleja. Porque se trató de un concurso que lo catapultó a la fama mundial con apenas 18 años y al que estuvo cerca de no ir por las muchas dificultades -de estructura y económicas- que se le presentaron para viajar a Moscú a concursar cuando apenas había participado de un evento de esa naturaleza -cuando estuvo en un certamen en Osaka (Japón) y, según sus propias palabras, lo “sacaron”-.

Pero en junio de 1985 el esfuerzo valía la pena más allá de las chances ganadoras que pudiera tener y los obstáculos que debiera sortear: ser parte del “V Concurso Internacional del Ballet de Moscú” significaba competir en uno de los eventos más importantes del mundo y hacerlo nada menos que en el Bolshói. Para Julio, fue como cantar Bingo.

Sin embargo, con el resultado puesto, el 26 de junio de 1985, más que un Bingo, el bailarín hizo saltar la banca aunque la expresión sea solo una metáfora: el talento, la capacidad de trabajo y el esfuerzo de Julio Bocca eran los motores de su éxito, y no el azar.

Julio Bocca cumple 56 años: la medalla de oro y la fama internacional

El verdadero premio por haber ganado aquel concurso en Moscú no estuvo tanto en la medalla de oro que se llevó a Buenos Aires, sino en el despegue que aquel triunfo significó para su carrera como primer bailarín.

“Fue el sueño del pibe hecho realidad”, comentó Julio, ya retirado de la escena, reflexionando sobre cómo fue su carrera. Ese logro que alcanzó a los 18 años en el Bolshói no era su debut en la danza, ya venía desde hacía años mostrando su talento. Pero sin dudas que fue su despegue, el que lo lanzó a la fama mundial y lo hizo al año siguiente convertirse en el primer bailarín del American Ballet Theatre, convocado nada menos que por Mijaíl Baryshnikov.

Su pareja de baile en aquella aventura fue la experimentada Raquel Rossetti, quien pertenecía al Ballet Estable del Colón. Rossetti conocía a Bocca y sus habilidades desde niño, dado que el bailarín se había iniciado a los 8 años en el Instituto Superior de Artes del Teatro Colón. Incluso, había sido pareja de baile en un especial para la TV cuando Julio tenía 15 años.

En el Teatro Bolshoi de Moscú, Julio Bocca tuvo una actuación consagratoria. Y además de la medalla de oro, ganó el reconocimiento mundial. FOTO: EFE Archivo TN

Convencido de que su única posibilidad de pisar el Bolshói sería formando parte del concurso, tomó la decisión de ir. Y el equipo fue con lo justo. Lejos de la estructura que acompañaba a otros bailarines, con profesores, arregladores y toda la banca detrás de ellos de los teatros, el dúo argentino viajó con quien fuera la gran maestra de Raquel Rossetti, Gloria Kazda.

La estadía, obviamente, también fue sumamente austera y cuidando los gastos. “Son cosas que también hacen más excitante y lindo todo lo que uno ama”, definió el artista años después.

Julio Bocca cumple 56 años: el inicio de carrera de un número uno

A lo largo de una carrera que se extendió hasta diciembre de 2007, cuando se retiró de la danza, Julio Bocca no solo que pisó en varias ocasiones el Bolshói sino que también bailó en el Royal Ballet de Londres, en La Scala de Milán, en Ópera de París y en la Zarzuela de Madrid, entre tantos escenarios famosos. Y en muchísimas ocasiones bailó El Quijote, posiblemente el mayor éxito de su carrera. Casualmente, fue la pieza que eligió para la primera ronda del concurso de 1985 en Moscú.

Los nervios llevaron a Julio a cometer un error que provocó las carcajadas de la platea. El bailarín quedó shockeado y aturdido, y fue su pareja la que lo volvió a la realidad. “En ese momento, Raquel, con una gran sonrisa luminosa y mientras seguíamos bailando, me mira y me dice, casi sin mover los labios: ‘La puta que te parió, calmate’. Fue como un cachetazo. Pero me tenté y me pude relajar”, relató Bocca. Lo que siguió fue perfección y ovación.

La misma que los acompañó en la segunda ronda del concurso (bailaron “A Buenos Aires”, el tango de Astor Piazzolla adaptado para ellos por el coreógrafo entrerriano, Gustavo Mollajoli) y en la final, cuando hicieron Cascanueces con dos particularidades: lo habían ensayado poco, porque no imaginaban llegar a la final, y la música que sonaba no era la pista con la que ellos se habían preparado sino la orquesta del Bolshói en vivo.

Aun con esas adversidades, ganaron. Fue en uno de los teatros más importantes del mundo de la danza y ejecutando la célebre pieza del ruso Piotr Tchaikovsky. Cualquier esfuerzo había valido la pena porque después de esas actuaciones en el Bolshói, la vida y la carrera de Julio Bocca se consagraron para siempre.

Fuente: TN

Esta entrada ha sido publicada el 6 de marzo, 2023 09:09

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