La modelo pasó dos meses en Estados Unidos junto a su pareja y las dos hijas de él.
A mediados de diciembre, tras finalizar su participación en el conocido reality de cocina, Rocío Marengo armó las valijas y se tomó un vuelo a Miami junto a su novio, el empresario Eduardo Fort. Con la familia de su pareja, la modelo celebró las fiestas en Estados Unidos y allí se instaló por casi dos meses.
Entre playas, shoppings y extensos paseos por los parques de Disney, la estadía de Rocío en La Florida se prolongó más de lo esperado. Después de varias semanas en el exterior, el grupo regresó a Argentina y, desde el sector vip de la primera clase, Marengo se filmó a sí misma. “Todo tiene un final y se terminaron las vacaciones. En realidad, un poquito de las vacaciones porque siguen Buenos Aires. Me gustaron los días de ocio, muy divertidos”, expresó con entusiasmo.
Los integrantes del clan Fort disfrutaron mucho de la presencia de la actriz, y Rocío se ganó rápidamente el cariño de las hijas de Eduardo. Si bien el empresario mantiene un perfil mucho más bajo que la ex vedette, en la filmación del aeropuerto hizo una excepción y apareció frente a la cámara junto a su novia.
En el clip filmado por Marengo se vieron pasaportes, boletos de vuelo, cargadores de celulares, auriculares y un lindo anillo de compromiso en la mano Rocío. En ese preciso momento, mientras ella grababa, se apagaron las luces del avión, bromeó con sus seguidores. “La mina seguía al pedo siempre”, comentó entre risas.
Ya en tierra firme, Rocío Marengo seguro se reencuentro con sus familiares, sus amigos y sus allegados más cercanos, ya que la estadía en Miami fue muy extensa. Si bien compartió detalles del viaje a través de las redes, donde se la veía muy feliz junto a Eduardo, sus hijas y sus sobrinos, la modelo estaba lejos de su círculo más íntimo. Será por eso que, desde sus historias, explicó: “Ya volviendo a estar un poquito con la familia”.
Fuente: eltrecetv
Esta entrada ha sido publicada el 5 de febrero, 2021 13:47
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