La diva interpeló a sus seguidores con un mensaje de aceptación y amor propio.
Luciendo un increíble traje de baño, un buzo amarillo y unos cancheros lentes de sol, Flor de la V posó desde la playa y compartió las postales con su millón de seguidores. Pero aunque en las fotos se la ve completamente segura de sí misma, en la descripción de las imágenes dejó en evidencia algunos feos recuerdos del pasado.
“Para mí, el pasillo de la carpa fue durante muchos años mi peor pesadilla. Para muchas mujeres sé que lo sigue siendo. Muchas chicas se preocupan por algunas estrías o un poco de celulitis, imagínense cómo se sentirían ustedes si todas las miradas fueran constantemente a sus genitales”, arrancó Flor.
Y continuó con su mensaje sin ningún filtro: “Muches tienen una obsesión con la entrepierna de las mujeres trans. ¡Sí! La idea fija… si se nota algo, si estamos operadas. ¿Cómo hacen? ¿Por qué preocupa tanto eso?”. Después, la vedette pasó a explicar cómo se puede “ocultar” la visibilidad de los genitales. “Para todes les interesades, les cuento que se llama truquín o trucar. Y sí, puede ser doloroso. Las mujeres trans lo hacemos por legítima defensa. Si no cumplimos con los estándares cis-normativos de la femineidad, somos castigadas. ¡Tenemos que empezar a generar mejores maneras de pensar y actuar el género”, detalló la actriz.
Por último, Flor de la V habló de cómo se siente actualmente con su cuerpo y apuntó directo a sus seguidores: “Hoy vivo y disfruto de mi cuerpo con plenitud, ya no soy esclava de la mirada de otres. El mejor cuerpo no es aquel que vemos en revistas, sino el que portan quienes viven su existencia gozando, sintiendo y tomando decisiones que no dependan (tanto) de la mirada ajena”.
“Lo importante es que si queremos un mundo más amoroso y empático, entonces tenemos que trabajar para que la multiplicidad (y no la homogeneidad) del cuerpo sea lo asumido como norma”, cerró de la V.
Fuente: eltrecetv