Le contó a Ciudad el encontronazo que tuvo con una madre cuando fue a buscar de urgencia a una de sus hijas a la escuela.
El viernes Cinthia Fernández (31) tuvo un día agitado, pero que recién trascendió el martes por la tarde cuando en Confrontados revelaron que tuvo un altercado con una madre del colegio en el que estudian sus tres nenas.
“Protagonizó un escándalo en el colegio donde van sus hijas. A Cinthia le habían avisado que una de sus hijas no se sentía bien, y llegó al colegio en su camioneta de la forma que pudo cuando había otra mamá que quería sacar el auto para irse. Ahí se produjo una discusión muy violenta, a los gritos. Parece que Cinthia se le fue al humo a la madre, la empezó a insultar, a golpear y patear la puerta del auto de la mujer. El escándalo fue tal que intervino un policía para tratar de calmar a Cinthia, porque estaba fuera de sí, porque encima fue delante de sus hijos”, detalló Carlos Monti en el ciclo de El Nueve. “Cinthia llegó dos horas después del llamado del colegio”, agregó.
Ciudad se comunicó con la madre de Charis (6), Bella (6) y Francesca Defederico (5) tras la difusión del conflicto y ella reconoció el exabrupto: “Ante todo, no demoré dos horas como dijeron. Llegué en 10 minutos porque en ese momento estaba en mi casa. Me llamaron del colegio porque Bella estaba descompuesta, estaba con vómitos y se había quedado dormida. Cuando llegué estacioné donde se ponen los autos en caso de emergencia, al lado de una ambulancia entre unos conos. Entonces, cuando fui a buscar a mi hija, una madre me dijo de todo, pero porque era yo ya que no obstruí ningún paso. Me dijo ‘esta pu… de mier.. que estaciona donde quiere’”.
-¿Y cuál fue tu reacción?
-Este tipo de situaciones las tengo todo el tiempo, me atacan a propósito por ser de la tele. Ella habrá pensado que estacioné ahí por privilegios, entonces me dijo una sarta de guarangadas que no me gustó. Entonces, cargué a la nena en el auto, estacioné al lado de la camioneta de la mujer que me insultó y le golpeé fuerte el vidrio. Le dije “bajate, vení y arreglamos las cosas, no me vas a insultar gratis. Estacioné ahí porque tengo a mi hija atrás descompuesta”. Además, tenía que salir con las otras nenas, y las tres mochilas, era una urgencia.
-¿Había muchos nenes alrededor viendo el escándalo?
-No había nadie alrededor porque no fue en el horario de salida. La mujer fue muy grosera y fui con todo a golpearle la ventana, y se pegó flor de cagaz… porque estaba pelotudeando con el celular esperando que sea la hora de salida de los chicos. Ella nunca bajó el vidrio y nunca le pateé el auto, pero de haberlo hecho no me hubiera arrepentido. Es típico, me la banco. Se piensan que tengo privilegios, pero soy una madre más en el colegio. Yo insulté a la mujer por todas las barbaridades que me dijo cuando tenía el vidrio bajo y me vio pasar. Le devolví los mismos insultos. Aparte me la ligué gratis.
-¿Es verdad que tuvo que intervenir la policía para calmarte?
-Sí. La policía está siempre por seguridad. Y el policía decía “¿Qué pasó? Cálmese, señora”. Ahí le dije que me tenía que aguantar a pelot… como ella. Con la Policía no tuve problemas, no me calmaron. Soy adulta y no me tiene que calmar nadie. Estaba desquiciada eh, pero no fue como lo contaron en Confrontados.
-¿Ya conocías a la mujer?
-Sí, de vista pero no de nombre porque vive teniendo problemas. Como que entra a la calle del colegio alterada tocando bocina queriendo pasar.
-¿Qué tenía Bella al final?
-Pensé que había sido algo del dengue porque tengo un vecino que tiene hace un año la pileta podrida. Yo ya me metí a su casa y se la vacié, pero la llenó de nuevo. Encima, el tipo está prófugo. Cuestión que al llegar a casa la bañé a Bella, vomitó tres veces más sin parar y se durmió. Fue un empacho, pero al principio me re asusté.
Fuente: ciudad.com.ar