Familiares de niños y jovenes que acudían al Instituto de Rehabilitación Bahiense INBARE, ubicado en Panamá al 900, se manifestaron frente al Municipio a raíz del inminente cierre de la institución.
“INBARE era un instituto que reunía a casi 80 concurrentes con diferentes capacidades. El 1 de marzo se nos informó mediante teléfono la decisión de la comisión directiva de cerrarlo a partir del 1 de mayo. Una decisión totalmente sorpresiva, más teniendo en cuenta la importancia que significa la atención de centros como estos para las familias que tenemos discapacitados en el seno familiar”, describieron las familias afectadas.
“La atención es excelente, realmente nunca tuvimos quejas sobre la atención de los profesionales que lo componen… el staff de psicólogos, orientadores, psiquiatras, kinesiólogos que hacían un trabajo maravilloso con los chicos, empatizando con todos, realmente los chicos anhelaban ir cada día por el hecho de que la pasaban realmente bien”, relatan sobre el funcionamiento del lugar.
“De repente nos dicen que en un mes cerramos. Y como el diablo mete la cola, tuvimos el 7 de marzo la inundación. El edificio tuvo un importante deterioro y entonces eso apresuró la decisión y prácticamente desde el primero de marzo no hemos vuelto a tener clases”, se lamentan.
“Necesitan su lugar, para eso están los lugares, para cuidarlos, para protegerlos. Nosotros le damos nuestro amor pero hay cosas que se nos van de las manos.. Así que necesitamos ya una respuesta. No podemos esperar mucho más”.
