Todo mal en el club blaugrana. Perdió al mejor jugador del mundo y de su historia por su bancarrota, pero aún tiene que saldar cuentas con La Pulga, que ya tiró para arriba todas las finanzas del PSG en apenas horas por el boom de su llegada.
Así como de su mano vivió la mejor época de su historia, parece que ahora, con su marcha, iniciará una de las más grises. Barcelona ya no será lo mismo sin Lionel Messi, a quien no pudo retener debido a su bancarrota, la que también será un problema mayúsculo una vez que se conoció la brutal suma que el club le debe al rosarino: nada menos que 52 millones de euros.
La cifra, reveló el diario Sport de Barcelona, se inscribe en el marco del sueldo diferido que se pactó con todo el plantel en el contexto de la pandemia, cuando el club era presidido por Josep María Bartomeu, quien se reunió con todos los futbolistas del primer equipo para renegociar sus contratos cuando se paralizó la competición durante el confinamiento.
El expresidente acordó entonces el pago aplazado de una parte importante de los salarios, que en el caso de Messi asciende a 52 millones de euros. Trascendió además que el Barça tiene previsto hacer los pagos de esta deuda entre lo que queda del 2021 y el 2022 y es justamente ese término, el de los plazos, lo que por estas horas negocian los abogados de ambas partes.
Barcelona, que está sufriendo importantes consecuencias económicas por la pandemia del coronavirus, vio cómo sumó un nuevo contratiempo con la marcha de Leo Messi del Barça, un inmenso reclamo para que miles de turistas visitaran la ciudad con la excusa principal de ver jugar al seis veces Balón de Oro.
“Su ausencia tendrá un impacto muy fuerte para Barcelona como destino turístico y otras áreas de negocio relacionadas también sufrirán por este hecho. Messi es uno de los principales embajadores de la ciudad en el mundo. Mucha gente vincula la marca Barcelona con Messi”, explica a EFE Nicole Kalemba, doctora en Economía y Empresa y profesora de la UPF Barcelona School of Management especializada en turismo deportivo.
En la misma dirección se expresa Eugeni Osácar, director de investigación del CETT (Centro Universitario de Turismo, Hostelería y Gastronomía adscrito a la Universidad de Barcelona) y especialista en la marca Barcelona.
“La ciudad tiene dos submarcas mundialmente conocidas, Gaudí y el Barça, y la segunda es la que ha predominado en los últimos tiempos gracias a la etapa gloriosa de títulos y Messi”, subraya.
Y añade: “Pero el primer impacto económico a causa de su adiós lo sufrirá el propio club, con una afectación en los visitantes al museo, en la mercadotecnia y en la venta de entradas”.
Antes de la pandemia del coronavirus, hay estudios que aseguran que el Barça aportaba el 8% del turismo de la ciudad de Barcelona y el ‘Experience Tour’, que incluye la visita guiada al Camp Nou y al museo del club azulgrana, tenía más de dos millones de visitantes anuales.
Eduard Torres, el presidente de Turisme de Barcelona, se muestra optimista de todas maneras y explica que el organismo no prevé “un impacto importante porque Messi tiene 34 años y todo el mundo era consciente de que su final en el Barça estaba cerca”.
“Como dijo Laporta, este final se ha anticipado dos años, lo horroroso hubiese sido que se marchara a los 27 o 28 años”, añade.
Además, Torres considera que “el punto fuerte es que Messi se ha hecho en Barcelona y ya está asociado a la ciudad”. Así, “en el relato de Messi está Barcelona, hasta cuando habla desde París”.
El verano pasado, cuando parecía que Messi ya iba a irse del Barça tras el envío del burofax con el deseo de abandonar el club azulgrana, la alcaldesa de la capital catalana, Ada Colau, dijo que el rosarino era “un icono inseparable de Barcelona” y pidió que se hiciera “todo lo posible” para que no se fuera.
“El mercado europeo es relevante para el Barça, pero aún lo son más los mercados como Estados Unidos, Oriente Próximo y Asia, y allí la ciudad de Barcelona se relaciona mucho con el Barça, algo que le ha dado mucha notoriedad mundialmente”, dice Kalemba.
Por este motivo, Osácar considera que “se tendrán que plantear nuevas estrategias de proyección de ciudad, sobre todo en los mercados asiáticos”.
Desde 2012, el Barça tiene un acuerdo con la Agència Catalana de Turisme (ACT) con el objetivo de promover la destinación turística en los mercados internacionales, con Barcelona en el epicentro. Durante los últimos años la ACT también se ha unido a diferentes deportistas y exdeportistas como Gerard Piqué, Carles Puyol, Ricky Rubio y Mireia Belmonte.
En 2014, la empresa Deloitte realizó un estudio sobre el impacto económico del Barça en Barcelona (es el más reciente que se ha hecho) y concluyó que en el curso 2013-2014 éste había sido de 759 millones de euros, lo que supuso el 1,2% del PIB de la ciudad.
Aunque Deloitte no especificó la influencia particular de Messi en estos números, cabe pensar que fue muy alta teniendo en cuenta que otros estudios explican, por ejemplo, que 8 de cada 10 camisetas del Barça que se vendían en las tiendas oficiales del club azulgrana eran del jugador argentino.
“Tener a Messi en Barcelona siempre es mejor que no tenerlo. Pero el Barça ahora debe seguir alimentando el relato de que es un formador de futuros Balones de Oro con su apuesta por La Masia”, señala Eduard Torres.
Además, el presidente de Turismo Barcelona explica que la Ciudad Condal está “construyendo un nuevo relato enfocado a la ciencia, la tecnología y los emprendedores” y que están “orgullosos de exportar este talento que después acaba regresando” a la ciudad. “Con Messi sucederá lo mismo”, sentencia.
Fuente: TN
Esta entrada ha sido publicada el 13 de agosto, 2021 11:20
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