Recuperados de Covid, Paola, Pocho y Roberta, volvieron a abrir las puertas de Corazones Solidarios en Villa Nocito. Paola Vergara, contó que el coronavirus la afectó psicológicamente porque la gente seguía yendo al comedor y ellos no los podía atender. Pasó por distintas etapas, con diferentes síntomas, pero no requirió la internación, le enfermedad la atravesó en su casa.
Después de haber pasado 15 días cerrado y curándose le pidió a la comunidad cuidarse y cumplir con todos los protocolos. “Hay mucha gente que no se cuida, que no cree y así vamos a estar peor”.
Frente a la demanda que tienen en el comedor, Vergara pidió la donación de frutas y verduras. Desde el inicio de la pandemia, un puestero los abastecía de estos alimentos una vez por semana y por la situación económica ya no lo puede hacer más. Apeló a la solidaridad de la comunidad para poder entregar a las más de 300 familias que asisten una dieta más equilibrada.
Esta entrada ha sido publicada el 6 de octubre, 2020 12:15
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