Luego de que estallara el escándalo por la presunta estafa en la venta de entradas para el partido entre Argentina y Brasil, la influencer bahiense Frany Pérez presentó una denuncia formal ante la fiscalía, en la que apunta contra el empresario Julián Bisignano, a quien señala como el encargado de proveerle los tickets.
Según el relato de Pérez, el acuerdo con Bisignano consistía en el pago por adelantado del 50% del valor de las entradas, mientras que el saldo restante se abonaría tras la entrega de los tickets. Sin embargo, la influencer sostiene que, pese a haber transferido el dinero pactado, el empresario nunca cumplió con la entrega y, por el contrario, exigió un pago adicional de 13 millones de pesos, que también fue abonado sin obtener respuesta.
De acuerdo con la denuncia, serían 500 las personas afectadas en Bahía Blanca y la región, mientras que el total de la estafa ascendería a unos 300 millones de pesos, con cerca de 2.000 entradas comprometidas que nunca fueron entregadas.
En un comunicado difundido en sus redes sociales, Pérez aseguró ser una víctima más y expresó su angustia ante la situación:
“Siempre di la cara y lo seguiré haciendo. Lamento profundamente lo ocurrido y entiendo la bronca de quienes confiaron en mí. Estoy priorizando la seguridad de mi familia, ya que estoy recibiendo amenazas y pedidos extorsivos por parte de quien nos debía entregar las entradas.”
Mientras tanto, muchos de los compradores estafados se agruparon para presentar demandas colectivas, exigiendo la devolución del dinero. Además, en redes sociales, varios usuarios manifestaron su indignación, señalando que confiaron en la influencer por su reconocida presencia en el ámbito digital.
María Virginia Stacco, abogada de uno de los damnificados, explicó que su hermano es parte de este grupo de personas que confiaron en la influencer por su presencia online y su historial de ventas previas sin inconvenientes. “Fue mi hermano una de las víctimas de esta situación, que claramente se configura como una estafa. Se compraron entradas, se abonó un precio mediante una red que se dedicaba a este tipo de ventas, y no se obtuvo a cambio el ingreso al partido de fútbol”, sostuvo la letrada.
El mecanismo, según los testimonios, se basaba en la promoción constante por parte de Pérez en redes sociales. Muchas personas aseguraron haberla conocido por recomendaciones o por seguirla en Instagram, donde mostraba un sistema aparentemente confiable de reventa de entradas. “Ella generó confianza. No había habido problemas antes. Incluso contaba con una página específica para la venta de tickets y tenía contactos que, supuestamente, le permitían acceder a entradas directamente de AFA”, detalló Stacco.