Sebastián Mazza, abogado y viudo de una de las víctimas de la tragedia ocurrida en Bahiense del Norte, se mostró aliviado tras la reciente resolución del fiscal general. “Para nosotros, esta decisión en un año tan duro, desde lo jurídico hasta lo emocional, fue un poco de aire para poder continuar buscando justicia y la verdad de lo que pasó”, declaró.
El fiscal general decidió revisar la actuación del fiscal de instrucción, quien había desestimado una denuncia, a pesar de haber reconocido la existencia de un delito e imputado a otra persona. “Esto era lo lógico, pero también es cierto que acá hay cuestiones de interpretación. Desde lo procesal, la resolución es correcta porque le señala al fiscal que no puede aplicar la desestimación de una denuncia cuando, al mismo tiempo, se reconoce un delito. El principio de no contradicción es claro: una cosa no puede ser cierta y no cierta a la vez”, explicó Mazza.
Según el abogado, la decisión marca un error en el cierre apresurado de la causa y ordena que se siga investigando, incluso si en el futuro no se generan nuevas imputaciones. “Cerrar la causa de esta forma hubiese sido ilógico. Hay eventuales responsables que no se han investigado suficientemente”, afirmó.
Mazza apuntó directamente a las autoridades del club y al municipio por su rol en la tragedia. “Las autoridades del club no son ajenas. Creo que pudieron prever lo que ocurrió, pero el fiscal de instrucción dice que no tuvieron previsibilidad. Y también hay responsabilidades municipales. Sabían que el lugar no estaba habilitado y no hicieron nada”, sostuvo con firmeza.
Comparando la situación con controles municipales en comercios, Mazza expresó: “Si cualquier comercio en esta ciudad abre sin habilitación, ya sea un café, un restaurante o un simple puesto de panchos, ¿cuánto dura? Dos minutos, porque el municipio viene, clausura, y hasta secuestra elementos. Pero acá hablamos de una institución que desde 2016 no completó su trámite de habilitación, y aun así siguió funcionando como un espacio de concurrencia masiva y paga”.
El abogado concluyó calificando de “insólito y disparatado” el hecho de que el municipio tuviera plena conciencia de esta irregularidad durante años sin tomar medidas efectivas para garantizar la seguridad de las personas.
La resolución del fiscal general reaviva la esperanza de Mazza y otras familias afectadas de esclarecer los hechos y que se determinen todas las responsabilidades en este caso que marcó profundamente a la comunidad.
Esta entrada ha sido publicada el 27 de diciembre, 2024 12:12
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