Durante esta mañana se ralizaron los alegatos de las partes, en la causa por el homicidio de Omar Kittler, hecho ocurrido en el barrio Patagonia, y que lleva al banco de acusados a Gabriel Nievas
El fiscal Jorge Viego solicitó la pena de prisión perpetua por el delito de homicidio criminis causa. El particular damnificado adhirió a lo solicitado por la fiscalía.
La defensa de Nievas pidió que se excluya la prueba de ADN, que no se tenga en cuenta el resultado de la extracción compulsiva de sangre porque no se cumplieron algunas cuestiones legales para obtenerla y en ese sentido indicó que no habría suficientes pruebas contra Nievas, por lo que pidió su absolución. De manera aleatoria, si los jueces consideren que Nievas estuvo en el lugar, pidió que el hecho sea considerado como homicidio en ocasión de robo y reciba la pena mínima prevista para ese delito.
Martiniano Grecco, abogado de la familia de la víctima, explicó que el delito encuadra como un homicidio criminis causa, es decir, un asesinato cometido para garantizar la impunidad del hecho. “Esta banda de delincuentes tenía un plan criminal, sabiendo que, si se complicaba, usarían las armas que llevaban. Una de esas armas fue la que causó la muerte del señor Kittler“, sostuvo.
La querella, en sintonía con el fiscal Jorge Viejo, solicitó prisión perpetua para los acusados. Grecco subrayó que “el homicidio fue cometido con el objetivo de escapar y procurar la impunidad del grupo“.
La defensa de Nievas pide absolución
Por su parte, la defensa de uno de los imputados, Nievas, solicitó su absolución, argumentando que no estuvo presente en el lugar del hecho. Según Grecco, esta postura contradice las pruebas científicas presentadas: “Hay una pericia de ADN que da positivo para Nievas. Su defensor intenta atacar esa prueba y pedir su exclusión por cuestiones técnicas procesales, pero estas ya fueron resueltas por el tribunal“.
El veredicto final se conocerá el próximo jueves 26, cuando el tribunal, compuesto por los jueces Eugenio Casas, Daniela Castaño y Clauda Fortunati, dé lectura a la sentencia.
Diferencias en las responsabilidades
El abogado también cuestionó cómo el jurado popular distribuyó las responsabilidades entre los imputados. Según Grecco, el jurado consideró al autor del disparo como el principal responsable, mientras que los demás acusados fueron catalogados con distintos grados de culpabilidad según sus roles en el hecho.
“No compartimos esa visión. Este es un caso de coautoría funcional, donde todos los involucrados tenían roles definidos y compartían las ganancias del delito. Todos iban armados, y si el disparo lo hizo uno, fue porque estaba más cerca de la víctima. Pero cualquiera pudo haber ocasionado la muerte, porque todos asumieron ese riesgo”, señaló Grecco.
Durante el juicio, los propios imputados reconocieron haber realizado inteligencia previa y repartido roles antes del hecho. “Admitieron que todos iban armados con pistolas 9 mm y que planeaban cómo reducir a las personas en el lugar. Incluso confesaron que habían acordado un reparto del 20% para cada uno“, explicó Grecco.
El tribunal, que deberá emitir una sentencia escrita explicando los fundamentos de su decisión, será clave para aclarar si el hecho se califica como homicidio criminis causa o como homicidio en ocasión de robo.
“La diferencia es crucial“, concluyó Grecco. “En este caso, los delincuentes mataron para garantizar su impunidad, no como una consecuencia del robo. Eso marca una intencionalidad distinta y justifica la pena de prisión perpetua“.