Bahía Blanca, una ciudad poco acostumbrada a competir en el ranking de temperaturas más elevadas del país, ha experimentado hoy una jornada de calor extremo, quedando entre las cinco ciudades más calurosas del país, según informó el meteorólogo Carlos Zotelo. Este fenómeno, aunque antes considerado inusual, podría convertirse en una tendencia más frecuente en los próximos años, alertó el experto.
El Servicio Meteorológico Nacional activó una alerta amarilla en la zona, anticipando temperaturas extremas en el partido de Bahía Blanca y localidades cercanas, como Villarino y Patagones. Zotelo explicó que este calor se debe a un núcleo térmico consolidado en el centro de la Pampa y el sudoeste de Buenos Aires, que ha traído consigo temperaturas que superan los umbrales necesarios para definir una “ola de calor”. Si estas condiciones se sostienen durante tres días consecutivos, con máximas superiores a 34,2 °C y mínimas de al menos 19 °C, se declararía oficialmente una ola de calor en la región.
El pronóstico para los próximos días anticipa un alivio relativo. Se espera una rotación del viento y la llegada de aire frío hacia el viernes por la tarde, con máximas que descenderían a 24 o 25 °C durante el fin de semana, una condición más habitual para esta época del año. Sin embargo, Zotelo advirtió que las temperaturas podrían volver a subir hacia la próxima semana, con picos de 28 °C el martes y miércoles.
Respecto al verano 2025, el meteorólogo señaló la posibilidad de temperaturas por encima de lo normal en la región, con un noviembre muy caluroso y un febrero nuevamente cálido. En cuanto a precipitaciones, la situación no es alentadora; las proyecciones indican que las lluvias podrían ser hasta un 20% menores que el promedio, complicando el abastecimiento de agua en Bahía Blanca, una ciudad que ya enfrenta dificultades tanto en la cantidad como en la calidad del suministro.