Toda la vida fue de Boca. Así lo asegura Olga, una mujer de 90 años que está a punto de cumplir uno de sus mayores sueños: visitar por primera vez La Bombonera. Su amor por el club de sus amores es tan intenso que, a pesar de haber estado casada toda la vida con un fanático de River, el clásico siempre fue motivo de disputas en casa. “Cada vez que jugaban Boca y River era una pelea, pero seguíamos adelante“, cuenta Olga, recordando con cariño esas batallas futbolísticas.
Este anhelo tan especial llegó como regalo de cumpleaños. “Cumplí 90 y mi yerno, que es buenísimo y conoce a mucha gente, me hizo este regalo. No sé ni cómo ni cuándo, solo sé que me tiene que llevar”, relató con emoción. Mientras se prepara para la gran visita, no puede dejar de pensar en el día en que finalmente verá al equipo de sus amores en el estadio.
Sin embargo, la emoción viene acompañada de ciertos temores. A sus 90 años, le preocupa la multitud joven que asiste al estadio. “A veces veo a tanta gente y pienso, ¿podré resistir? Pero por suerte me dieron un asiento en la platea baja. ¡No me imagino rodando desde arriba!”, bromea.
Olga es una apasionada del fútbol. Sigue los partidos de Boca por televisión o radio, y sus gritos son tan intensos que “seguro los vecinos ya saben que soy hincha de Boca”. Ahora, solo espera poder disfrutar este momento al máximo y, por supuesto, que su equipo gane. “Ojalá que Boca gane, aunque sea 1-0. Si mete un gol, creo que todos van a escuchar el grito que voy a pegar. ¡Qué lindo sería!”, suspira.
Para Olga, este no será solo un partido más, será el día en que coronará un sueño de toda la vida.
