Una abogada bahiense se resistió a que le secuestraran el auto durante un operativo de control y estuvo casi 4 horas encerrada en su auto.
“Le hicieron una prueba de alcoholemia que resultó fallida en 3 o 4 oportunidades y por, ese motivo, se generó una presunción de alcoholemia positiva”, explicó Carlos Salgado, juez municipal de faltas.
Tampoco tenía el seguro del auto, aclaró el magistado. Fue identificada como María Belén Trotta. Ocurrió en la primera cuadra de la calle Darregueira, frente al Colegio Del Solar.
Al solicitarse la documentación del vehículo, los agentes de tránsito descubrieron que el automóvil no contaba con el seguro obligatorio, lo que legalmente justifica el secuestro del vehículo. Sin embargo, la conductora se negó a entregar el auto y optó por permanecer dentro del mismo, complicando aún más la situación.
El proceso para la restitución del vehículo incluye la presentación de toda la documentación pertinente. La conductora tiene derecho a hacer un descargo formal contra la presunción de alcoholemia positiva y la falta de seguro, lo que le permite defenderse y presentar sus argumentos en contra de las acusaciones.
Al ser cuestionada sobre el motivo de su negativa a abandonar el vehículo, la mujer argumentó que, en su interpretación, la falta de seguro y la presunción de alcoholemia no eran razones suficientes para el secuestro del automóvil. Alegaba que con solo una multa o infracción sería suficiente para continuar su trayecto.
No obstante, la legislación vigente contradice esta creencia, estableciendo claramente que estas infracciones justifican la retención del vehículo hasta que se regularicen las condiciones necesarias para su circulación.
Esta entrada ha sido publicada el 5 de julio, 2024 11:35
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