La reciente movilización multitudinaria a nivel nacional, que congregó a miles de personas en apoyo a las universidades públicas, ha tenido una repercusión significativa en la agenda gubernamental. Frente a la presión social, el gobierno se comprometió a abordar urgentemente los gastos operativos de las instituciones académicas, una necesidad crucial para su funcionamiento. Sin embargo, este es solo uno de los aspectos de la compleja realidad que atraviesan las universidades. Los reclamos salariales y el apoyo a los estudiantes siguen siendo temas críticos sin resolver.
Una destacada representante de los docentes universitarios, subrayó que la brecha entre la inflación y los aumentos salariales otorgados a los docentes y personal no docente ha alcanzado un alarmante 60%. Esta disparidad refleja la severa erosión del poder adquisitivo de los trabajadores de la educación superior. “Sin docentes y personal administrativo, las universidades no pueden operar. Es fundamental que se aborden estos reclamos salariales con la urgencia que merecen”, declaró en rueda de prensa.
Mencionaron además, a modo de ejemplo, un egresado reciente que se desempeña como ayudante con una dedicación simple, trabajando 10 horas semanales, percibe apenas 134.000 pesos mensuales, una suma que resulta insuficiente para cubrir los costos básicos de vida.
Además de los problemas salariales, los estudiantes universitarios enfrentan serias dificultades económicas. Según datos recientes, la canasta estudiantil, que cubre los gastos esenciales de un estudiante, ronda los 600.000 pesos mensuales, cifra que se actualizó el mes pasado. Sin embargo, las becas destinadas a aliviar esta carga no han tenido aumentos significativos. Aquellos incrementos que se han otorgado están muy por debajo de las necesidades reales, siguiendo la misma tendencia que los salarios docentes, dijeron.
“El gobierno parece estar jugando a dilatar las negociaciones. Lo que exigimos es una propuesta seria y la apertura de un diálogo real”, afirmó un representante sindical. Esta falta de acción ha llevado a los docentes y personal no docente de las universidades nacionales a tomar medidas de fuerza, con un paro de 48 horas.
Como parte de las actividades de protesta, se ha convocado a una asamblea interclaustros que se llevará a cabo hoy, martes 11 de junio, en el complejo de la UNS en Alem, a partir de las 14 horas. Esta reunión reunirá a docentes, estudiantes universitarios y preuniversitarios, autoridades y miembros de la comunidad, incluyendo padres y madres, para debatir sobre los pasos a seguir.
En este contexto, las universidades están llamando a toda la comunidad a sumarse a las movilizaciones y apoyar sus reclamos. “No estamos pidiendo aumentos desproporcionados, solo buscamos que nuestros salarios y becas se ajusten a la realidad económica que vivimos. Necesitamos el respaldo de todos para que las universidades puedan seguir cumpliendo su misión educativa y social”, concluyeron.
Esta entrada ha sido publicada el 11 de junio, 2024 12:07
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