Hubo un gran impacto de la devaluación en el país y eso generó la actualización de precios en varios sectores, incluyendo gastronomía.
Por tal motivo hay preocupación por el aumento de precios que llega hasta un 80%, dificultando la fijación de costos y afectando el consumo en varios locales bahienses.
Hubo aumentos inesperados en insumos como la carne, con incrementos de hasta el 120%. Por tal motivo, le comerciante, Facundo Borri, habló de los desafíos para mantener los precios estables y el temor a no poder reponer mercadería ante la inestabilidad del mercado.
Por otra parte, los aumentos en servicios básicos como luz, con incrementos del 100%, generan la incertidumbre por la rentabilidad y sostenibilidad de los negocios.