Más de 30 entidades que congregan a médicos de distintas especialidades anunciaron que comenzarán a cobrar un copago o bono adicional por atender a pacientes de prepagas y obras sociales, y que lo ajustarán cada dos meses. Ese adicional podría tener un piso de 6.000 pesos por consulta.
“Hoy, los médicos decimos ¡basta! Basta de imponernos un valor no digno para nuestros honorarios, basta de demoras en los pagos, basta de débitos injustificados, y basta de no tener control sobre el valor de nuestro trabajo”, advirtieron.
Ese adicional, que representará un dolor de cabeza extra para millones de argentinos, busca que los médicos cobren un piso de 6.000 pesos por consulta. No aclararon cuánto es la diferencia que deberá abonar el paciente en ese “bono” para que los profesionales puedan cobrar ese dinero por consulta.
La decisión la comunicaron más de 30 sociedades y federaciones médicas de distintas especialidades de todo el país.
Lo llaman “bono complementario no reintegrable“, que deberán abonar los pacientes para que los profesionales puedan llegar al piso de 6.000 pesos por consulta que, según reclaman, no estarían alcanzando.