En muchas regiones del planeta, el invierno y el frío son sinónimos de la llamada gripe estacional, que según la Organización Mundial de la Salud (OMS), tiene fácil propagación y se transmite rápidamente en entornos como las escuelas y se caracteriza “por el inicio súbito de fiebre, tos (generalmente seca), dolores musculares, articulares, de cabeza y garganta, intenso malestar y abundante secreción nasal.
Como se ve, los niños están entre los más afectados por las enfermedades respiratorias y los virus durante la temporada invernal. Con la llegada de las vacaciones de mitad de año, estos cuadros pueden poner en jaque el descanso y generar preocupación en el entorno familiar.
Marcelo Dieguez, especialista en Clínica Médica dijo que “Para prevenir estas enfermedades, es importante mantener un sistema inmunológico fuerte, consumiendo alimentos saludables y ricos en vitaminas y minerales. La ventilación adecuada de los espacios durante al menos una hora con corrientes de aire cruzadas es recomendable, también. Y el lavado de manos es muy importante, al igual que el uso de mascarillas o cubrebocas cuando sabemos que estamos enfermos y podemos contagiar a otros”.
El Ministerio de Salud destaca la importancia de la vacunación contra la influenza para prevenir casos graves y hospitalizaciones, especialmente entre adultos mayores y personas con afecciones respiratorias. Las bajas tasas de vacunación son motivo de preocupación, y se insta a las personas a mantenerse alerta.