Tras la brutal golpiza el fin de semana en Fitz Roy al 400, entre un grupo de jóvenes, el dueño del boliche Paolo, salió a manifestar que los que mantuvieron la gresca, no fueron a su local nocturno.
Marcelo Rossi, dueño del lugar hace 21 años, aseguró que cuentan con 16 cámaras y revisaron una a una, ninguno de los involucrados en la pelea, había estado en el boliche.
“Para mí alguien estaba haciendo algo que no correspondía y pasó lo que pasó, porque estaban con camisetas de fútbol y mochila. Y esa gente no estaba vestida para ir a bailar, por lo menos en mi negocio no entran así“, sostuvo.
Además, destacó que el incidente ocurrió fuera del boliche y que siempre cumplen con los requerimientos impuestos. “No podría acompañar a todo el mundo a la casa para que llegue sano y salvo, tiene cada uno que ser responsable de los actos de cómo se maneja en la vida. Yo te puedo decir lo que pasa dentro del establecimiento y a la salida, todo eso está chequeado por la policía que hace el cierre”, concluyó.