El hecho se produjo 21 de noviembre y había sufrido graves heridas cuando explotó una garrafa en su vivienda del barrio Rosendo López, en Guardia Vieja y San Lorenzo.
Eduardo Ariza, de 41 años, era asistido en el Sanatorio Antártida Argentina, en Buenos Aires.
El hombre estaba manipulando una garrafa de 5 kilos y, por causas desconocidas, ocurrió la explosión tras una pérdida de gas.