Pilar tiene 11 años, es oriunda de Saldungaray, su diagnóstico es encefalopatía crónica. Hace 5 años tiene una luxación de cadera. Al principio no sufría, pero con el tiempo comenzaron los dolores hasta el punto de no poder pararse.
En el año 2020 hicieron el pedido a la obra social IOMA, de una prótesis para que pueda operarse y mejorar su calidad de vida.
Casi dos años después, no hay respuesta y el cuerpo de la niña cambia y se hace más difícil.
La familia reclama: “No es justo que tengamos que comprar nosotros la prótesis, para eso aportamos todos los meses a la obra social. Necesitamos una solución urgente”, aseguró Estefanía Braun mamá de Pilar.