Liberman: “No tengo dudas que la inflación de fin de año va a ser de tres dígitos. Y puede ser muy arriba de 100 %”

Mientras el dólar no parece encontrar techo, algunos especialistas en economía temen que la dinámica de la inflación se descontrole, ya que muchos productos tienen su valor atado a la cotización de la moneda norteamericana. El viernes el billete libre cotizó al borde de los 350 pesos.

En Siete Mundo Especial, el economista Oscar Liberman alertó sobre esta situación. Señaló que el país se encuentra en una dinámica de hiperinflación desde hace más de 10 años y que la inflación podría superar el 100% a fin de año. “Yo no tengo dudas que el número de fin de año va a ser de tres dígitos. Y puede ser muy arriba de 100 %. Hoy tenemos una crisis como yo no tengo recuerdo haber visto. Para mi es la más importante”.

“Nosotros estamos dinámica de hiperinflación desde el último año de gobierno de Néstor Kirchner. La hiperinflación nosotros la medimos siempre por el resultado. Cuando cruza los tres dígitos es hiperinflación. Pero hay un proceso para llegar. Rara vez una inflación lineal, una inflación que viene subiendo todos los meses llega a los tres dígitos. Para llegar ese valor el proceso tiene que ser exponencial. Es un proceso que se acelera, que se dispara. Nosotros estamos en un proceso exponencial, con una retroalimentación desde el último año del gobierno de Néstor Kirchner, aseguró Liberman.

En ese sentido señaló que el gobierno tiene que buscar la forma de fortalecer al peso y no de bloquear el acceso de los argentinos al dólar, como resguardos de sus ahorros por el avance de la inflación. “El dólar sube, las medidas que se toman son muy desacertadas. Porque en esa situación, el problema es cuándo nos ponemos a trabajar para volver a tener una moneda y no cómo le bloqueamos las salidas a la gente que se está escapando del peso, donde se siente estafado por su propio gobierno de turno. Argentina tiene una crisis inflacionaria, el gobierno de turno estafa su población. La gente se escapa y es dramático, porque lo que estamos viendo ahora es precio de pánico, es cierto. Pero el precio de pánico de hoy puede ser el precio barato de mañana. El problema es que ahora con una devaluación no se arregla esto. Todas las posibilidades de arreglos parciales o, de como estamos acostumbrados a escuchar Argentina, conjuntos de medidas, ya se tomaron”.

Por otra parte, analizó que la crisis económica se sustenta en un problema político. Y explicó que ya no sólo se trata de una crisis de confianza con los gobernantes, sino que esa relación ya está rota: “La crisis económica argentina tiene una raíz política. El problema nuestro es político. Hasta la crisis anterior, lo que tuvimos fue una crisis de confianza. Yo creo que ahora no tenemos una crisis de confianza, ahora estamos en un paso más adelante. Ahora se rompió la relación entre las partes de la economía. Haciendo un paralelismo con una relación entre personas sería que alguien no tiene confianza en el otro. Nosotros estamos en una etapa posterior acá, en la ruptura de relación. La relación entre el estado y la gente, entre lo que lo público y lo privado se cortó, se rompió”.