Desde hace varios días el intenso frío castiga fuerte con temperaturas que promedian los 2 grados bajo cero. Y quienes más padecen las consecuencias del riguroso invierno son las personas con necesidades básicas insatisfechas.
Entre ellas los más humildes, ancianos y niños que viven en precarias viviendas de barro y adobe y no tienen qué ponerse para parar un frío que por estos días taladra hasta los huesos.
Mara Pérez es una de los tantas mujeres humildes que por estos días afronta las crudas inclemencias del tiempo con lo poco que tiene y lo que recibe como asistencia y que siempre resulta insuficiente. El frío que se registra por estos días desnudan las necesidades más básicas de la gente como el acceso a una vivienda digna, alimentación o una calefacción adecuada para contrarrestar un invierno que se presenta muy riguroso.
Para colaborar con la familia podés llamar al 291-4363584 / o en El Calden 2176.