El 30 de septiembre se conmemoró el Día Internacional de la Concientización sobre el TEL (Trastorno específico del lenguaje) Los afectados y sus familias son protagonistas de una carrera de obstáculos en la que el lenguaje es amigo y enemigo. Es un problema que, en muchos casos, tarda en detectarse y complica la actividad social del afectado.
“No solo es el lenguaje, es un trastorno emocional. Si no podés expresarte, no podes decir como te sentís” asegura Jésica Roldán, mamá de Emanuel a quien hace 10 años se le detectó TEL.
Además como padres, solicitan capacitaciones profesionales a médicos pediatras para detectarlo a tiempo y además que el sistema de salud pueda contemplar el trastorno ya que, no tiene cura pero si, herramientas para una mejor calidad de vida.
