El 23 de junio quedará grabado en la memoria Aldana Frers y en la de toda su familia. Ese mediodía, su pareja, Federico Carreño arribó a la vivienda de Mitre al 900 para trasladar a la joven a su lugar de trabajo y se encontró con un padre enfurecido. Gastón Frers había escuchado una grabación donde Carreño sometía a su hija a una serie de amenazas y abusos. Frers le disparó y hoy está detenido, acusado de intento de homicidio.
Tres meses pasaron de aquel día y para Aldana, cada día se hace más difícil aunque, ella asegura sentir mucha paz tras haber contado el calvario que sufrió.
“Carreño me amenazaba constantemente. Nunca podía contar nada en mi casa, Me pone mal que mi papá ahora esté pagando por todo”, lamentó. “Sufrí violencia física y sexual” agregó.
Recordamos que, de forma paralela a la causa que tiene como detenido a Frers, se abrió otra por abuso y violencia de género, que apunta directamente a Federico Carreño. Aldana se sometió a pericias y los profesionales constataron que la muchacha había sufrido toda clase de agresiones por parte de Carreño durante 1 año y 7 meses, periodo en el que perduró la relación.
El pasado jueves, el juez Esteban Usabiaga le concedió el arresto domiciliario a Frers, pero la resolución fue apelada y ahora su familia aguarda no se demore la decisión final. «A mi papá no lo veo hace más de tres meses. Apelaron la decisión del juez con argumentos falsos. Mi papá está preso en Saavedra. Estamos en una condición de extrema vulnerabilidad. Carreño debería estar preso, es un peligro para toda la sociedad».
Aldana espera ser escuchada. Tiene miedo porque Carreño solo tiene una restricción perimetral de 100 metros, lo que no garantiza que se acerque a ella.
Esta entrada ha sido publicada el 30 de septiembre, 2021 13:44
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