Francesco tiene 5 años, sufre Síndrome de Dravet. Iba a ser trasladado para ser atendido en el Hospital Garrahan de Buenos Aires el día 30 de julio, pero desde el Hospital Municipal se evaluó la situación del nene y aseguraron que, como Francesco hace dos meses no tenía convulsiones, podía viajar de manera particular, en colectivo o tren. Lamentablemente, un día antes, sufrió una descompensación que lo derivó a terapia intensiva.
La madre de pequeño, Karina Villanueva, pidió que le otorgaran una ambulancia para trasladarlo a Buenos Aires, porque temía que Fran no soportara tantas horas sin asistencia pero, según la familia, el hospital se negó al pedido asegurando que solo contaban con dos vehículos.
Además, Francesco necesita una medicación que tiene un costo altísimo y que la familia no puede costear.
La enfermedad no tiene cura, pero el tratamiento puede mejorar la calidad de vida del niño.
